1 Reconstruiré algunos elementos de esta huelga en el apartado “La huelga del año 2005. Segmentación entre ‘trabajadores’, ‘funcionarios’ y ‘comunidad’” del capítulo 1.

2 Para no volver engorrosa la lectura, prescindimos aquí de desagregar los aportes de la literatura argentina sobre las restricciones visibles en el proceso de resurgimiento de las organizaciones sindicales a nivel nacional en el periodo de la post-convertibilidad. Para un análisis de diversos indicadores, como el mantenimiento de procesos de flexibilización laboral, la descentralización de las negociaciones colectivas, la pérdida de poder adquisitivo del salario y otros indicadores, ver Atzeni y Ghigliani (2008), Barrera Insua (2015), Del Bono & Bulloni (2013), Haidar (2013), Marticorena (2011), Morris (2017), Varela et ál. (2016).

3 Estas características hicieron que una parte de la bibliografía sobre el sindicalismo en la etapa de la post-convertibilidad gire en torno al concepto de burocracia sindical (Basualdo et ál., 2010; Santella, 2011b; Varela, Haidar, et ál., 2016).

4 Ver Abal Medina y Diana Menendez (2011), Delfini, Drolas, y Montes Cató (2014), Lenguita (2011), Longo (2014), Santella (2011a), Varela (2015), Varela et ál. (2016).

5 La entrada de nuevos trabajadores a los espacios de trabajo muchas veces implicó un recambio generacional a partir de la incorporación de jóvenes al mercado de trabajo y a las organizaciones sindicales. Para una presentación de los principales elementos para analizar la participación política juvenil en las organizaciones sindicales en la post-convertibilidad ver Beliera y Longo (2014).

6 En el capítulo 4 me ocuparé de analizar cómo se articulaba la historia de este médico con los sentidos que le asignaban a “la profesión” los integrantes de SiProSaPuNe. Para una reconstrucción de la historia de este hospital, ver Taranda et ál. (2008), Mases et ál. (2015) y Pulita (2015).

7 En el año 1884 se había decretado la Ley Nº 1532 de organización de los Territorios Nacionales, mediante la cual se creaban gobernaciones dependientes del Estado Nacional fuera de los límites de las primitivas catorce provincias argentinas. Eran los territorios de Misiones, Chaco, Formosa, La Pampa, Neuquén, Rio Negro, Chubut, Santa Cruz y Tierra del Fuego.

8 Tal como indica Ramacciotti (2011) las acciones sanitarias del gobierno nacional y la construcción política de Ramón Carrillo construyeron una dinámica institucional del Estado Nacional que abonó a la conceptualización de la salud pública como un derecho social.

9 Los gobernadores del MPN durante periodos constitucionales han sido: Felipe Sapag (1963-1966; 1973-1976; 1983-1987; 1995-1999), Pedro Salvatori (1987-1991), Jorge Sobisch (1991-1995; 1999-2003; 2003-2007), Jorge Augusto Sapag (2007-2011 y 2011-2015) y Omar Gutiérrez (2015-2019). Felipe Sapag fue también gobernador interventor entre 1970 y 1972, designado por Juan Carlos Ongania durante el periodo de la dictadura militar autodenominada Revolución Argentina.

10 Una institución fundamental fue el Consejo de Planificación y Desarrollo –CoPaDe–, cuyo propósito era elaborar diagnósticos para asesorar en materia de políticas para el desarrollo a mediano y largo plazo.

11 Se trata de las siguientes obras: la edificación de una moderna procesadora de gas y petróleo, la construcción de los oleoductos que pasan por los territorios neuquino y rionegrino, y la construcción de un gran gasoducto entre las ciudades de Neuquén y Bahía Blanca que permitió la salida directa al puerto (Favaro, 2005), la construcción de las represas Chocón-Cerros Colorados, Alicurá, Piedra del Águila y Pichi Picún Leufú, y un dique compensador en Arroyito.

12 De acuerdo con el censo nacional realizado en el año 2010, la población total de la provincia de Neuquén es de 551.266 habitantes, y la mayoría de la población se concentra en el departamento Confluencia (donde se encuentra la ciudad capital) que cuanta con 362.673 pobladores.

13 Interrumpidos por una gobernación de Felipe Sapag entre los años 1995 y 1999.

14 Algunos autores han recurrido al concepto “campo de protesta” para señalar la particular beligerancia y militancia presente en Neuquén, resaltando la multiplicidad y complejidad de acciones colectivas directas en contienda con las autoridades estatales. Ver Aiziczon (2005, 2009, 2010, 2012), Bonifacio (2011). Este concepto es retomado de la teoría de Bourdieu y los autores hacen referencia a algunas propiedades específicas de este campo, como una illusio, un habitus y un capital específico de la protesta. Considero que este concepto se vuelve torpe para el análisis cuando se toman en cuenta estas propiedades específicas del campo. No podría afirmar que exista claramente un campo de protesta autónomo con su capital e “illusio” específicos al pensar las acciones colectivas, ni que este supuesto campo coincida exactamente con una porción geográfica definida de ante mano (como lo es una provincia). Para un análisis más exhaustivo de las dificultades que presenta este concepto ver Beliera (2013).

15 Si bien claramente forma parte de la línea parental de la familia Sapag, su trayectoria política estaba fuertemente vinculada con Sobisch. Fue Ministro de Gobierno, Educación y Justicia entre los años 1991-1905 y Vicegobernador a partir de 1999. Estas participaciones dan cuenta de los acuerdos y alianzas realizados al interior del partido entre las dos líneas, aunque no hicieron desaparecer los conflictos.

16 La idea de centro está inspirada en el análisis de Neiburg (1990, 2003) sobre la disputa cultural y simbólica que implicó la participación de los trabajadores durante el peronismo en Argentina.

17 Para un análisis de este proceso, ver Aiziczon (2012).

18 Aunque como se sabe a nivel nacional ATE había sido creada en el año 1925, obteniendo su personería jurídica en 1937 y su personería gremial en 1946 (Parcero & Calello, 2004, 2008).

19 Quiero agradecer especialmente a Fernando Aiziczon por haberme facilitado parte de su archivo sindical para poder reconstruir estos procesos. La reconstrucción de las huelgas de los años 1991 y 1993 fue realizada a partir de las Memorias y Balances de ATE Provincial suministradas por él.

20 A pesar de que he decidido mantener los nombres reales de la dirigencia provincial del gremio, mantendré el nombre ficticio de José dado que se trata de uno de los trabajadores del HPN con quienes me vinculé en el trabajo de campo y cuya experiencia analizo en el capítulo destinado al estudio de la lista Verde Morada.

21 Se produjeron importantes movilizaciones en las localidades Andacollo, Centenario, Cutral Có, Loncopué, Bajada del Agrio y San Martín de los Andes.

22 Este aumento salarial finalmente nunca se concretó debido al desarrollo del conflicto gremial.

23 O cuatro turnos de 6 horas, dependiendo de los servicios. Hay servicios que tienen un régimen laboral de seis horas por la insalubridad de las tareas o el estrés que implican.

24 De esta forma, la Argentina se aparta de la recomendación efectuada por la Comisión de expertos de la OIT en 2003, según la cual la determinación de los servicios mínimos no debería corresponder al Ministerio de Trabajo sino a un órgano independiente (CENDA, 2006).

25 El hecho de que el conflicto en ámbitos estatales de trabajo implique una particularidad por la presencia del Estado-empleador como parte de las relaciones laborales ha sido señalada también en otras investigaciones (Aspiazu, 2011; Baldi, 2012; Diana Menéndez, 2007).

26 Correspondientes a los votos de los partidos PJ, ARI-Encuentro Neuquino, MID, Recrear, Frente y la Participación Neuquina, la UCR y Patria Libre.

27 En una carta de lectores publicada en el diario local, los trabajadores de neonatología del HPN afirmaron que era habitual que se realicen traslados de pacientes por falta de insumos o infraestructura para su adecuada atención, y que esto no dependía de la realización de las medidas de fuerza. Afirmaron que durante el 2003 fueron derivados 74 pacientes y en el año 2004 29 al sector privado (Diario Río Negro, 2005c).

28 Este conflicto se resolvió recién en el año 2007 cuando obligaron a los anestesistas a cubrir horas como “carga publica” a través de resoluciones del Ministerio de Salud Neuquino (Diario Río Negro, 2007e).

29 Los enunciados performativos son actos del habla en el sentido que la acción se realiza en el propio acto de enunciación (por ejemplo, afirmar “yo juro”).

30 FeSProSa es una entidad de segundo grado constituida en el año 2005 a partir de la reunión de varias Asociaciones de Profesionales por establecimientos provinciales, regionales y nacionales.

31 Como se sabe, la legislación argentina regula dos tipos de asociación sindical: “la asociación sindical simplemente inscripta”, y la “asociación sindical con personería gremial”. El sindicato con simple inscripción es aquel que se ha inscripto en el registro especial que tiene a su cargo el Ministerio de Trabajo, y obtiene su personería jurídica (pero no la personería gremial). Tal como explica Alfie (2010, pp. 44-45), conforme al sistema argentino, “sólo un sindicato de todos aquellos inscriptos (siempre con relación a un determinado ámbito personal y territorial) va obtener la personería gremial. ¿Cuál? El más representativo, que es aquél que cuenta con el mayor número promedio de afiliados cotizantes sobre la cantidad de trabajadores que intente representar”. De esta forma, el Estado otorga personería gremial a aquel sindicato que cumpla con el requisito de mayor representatividad (que debe ser como mínimo 20% de los trabajadores que pretende representar) y que haya actuado como asociación simplemente inscripta por lo menos seis meses.

32 Para una reconstrucción de cómo se desarrolló este conflicto en el gremio docente, ver Burton (2012).

33 Esta división del agrupamiento profesional es rechazada por los miembros de SiProSaPuNe ya que fragmentaba al colectivo de profesionales y establecía para cada grupo cierta divergencia en las condiciones laborales.

34 Como hemos visto en el capítulo 1, en el año 1982 los trabajadores “profesionales” del hospital decidieron crear una asociación civil para nuclear gremialmente a este grupo y en el año 2005 conformaron finalmente un sindicato. En el año 1998 el gobierno provincial otorgó un aumento salarial únicamente al sector de trabajadores “profesionales” provocando una de las mayores huelgas del sector protagonizada por los trabajadores “no profesionales”. En las huelgas del año 2005, 2007 y 2011 la segmentación entre estos grupos se profundizó por diversos desacuerdos respecto del reparto de la masa salarial.

35 Para las otras listas, como la lista GranATE y la Lista Violeta Negra, la articulación con el sector “no profesional no constituía un rasgo identitario, como sí aparecía en la experiencia de la lista Verde Morada.

36 Es usual que las personas de Neuquén usen la radio para enterarse de las novedades locales, y la televisión para actualizarse sobre la realidad nacional (puesto que la mayoría de las productoras televisivas transmiten información sobre Buenos Aires).

37 En su investigación, también Farece (2016) ha registrado que las acciones de los militantes sindicales transcendían el espacio laboral como ámbito exclusivo de la intervención gremial, mostrando cómo la realización de fiestas permitía la construcción de membresías sindicales ligadas a valores y prácticas específicas.

38 Catalina ingresó al trabajo hospitalario a partir de la empresa tercerizada que realizaba la limpieza de pasillos y salas de espera.

39 También Abal Medina (2014) registró, en el análisis sindical en empresas supermercadistas, que los delegados y dirigentes sindicales se referían a las organizaciones sindicales con metáforas hogareñas. Ella identifica la metáfora de la casa a partir de la cual los dirigentes se referían a los afiliados del sindicato (“estar bien con los de la propia casa, con los de adentro”) y construían un límite con “los de afuera”.

40 La identificación de la organización gremial como un espacio de cuidado era central en la agrupación Verde Morada, cuestión que analizaré más adelante.

41 En referencia al famoso tema “Yo caníbal” de la banda de rock Patricio Rey y sus redonditos de ricota.

42 La expresión que utiliza Sonia (“cuando estamos de mucamas”) muestra un mecanismo similar al registrado por Ferraudi Curto (2006) cuando las personas le contaban qué hacían “cuando iban de piqueteros a una movilización. Sonia no afirma que ella “es mucama” sino que a veces “está de mucama”. Registrar esto nos permite poner en tensión la idea, usual en los estudios sindicales, de que los trabajadores (principalmente las bases) tienen una identidad laboral articulada casi de manera unívoca con las labores que desempeñan. El saber-hacer aparece en esos casos como un aparente ser que moldea la identidad. Sonia, en cambio, resalta que el ser mucama es una situación, más que una identidad fija.

43 Ferraudi Curto (2009) ha señalado también esta particularidad para el caso de militantes barriales que se diferenciaban de las tradicionales estructuras partidarias.

44 Este evento ocurrió en el año 2010 cuando los trabajadores estatales estaban llevando adelante un plan de lucha en reclamo de aumento salarial.

45 Obviamente, este vínculo no sólo cimentaba una relación particular con las mujeres, sino que además construía un tipo específico de masculinidad entre los varones. Entre ellos se hacían chistes cuando consideraban que no eran completamente varoniles e intentaban demostrar quién era el más fuerte, el más caballero, el más conquistador. Estas cuestiones son significativas en el análisis por la disrupción que generó la construcción de la agrupación Violeta Negra a este respecto en los añores posteriores, como veremos en el siguiente capítulo, al haber ocupado una mujer el puesto de Delegada General de la JI.

46 El valor que asume el estar en el espacio de trabajo para hacer frente a las sospechas y desconfianzas respecto a la participación gremial ha sido señalado también por Abal Medina (2014).

47 De manera similar a la señalada por Manzano (2011) y por Ferraudi Curto (2009) para otros casos.

48 Resulta significativa la clasificación que José realizó de las cualidades necesarias en el proceso de construcción de dirigencias en la agrupación Verde Morada: no se trataba tanto de cuestiones programáticas, sino de reunir aspectos “anímicos, morales e intelectuales”.

49 La lista estuvo compuesta por tres enfermeros, dos camilleros, un auxiliar de servicio (que se dedican a la descontaminación de la “unidad del paciente”), una trabajadora administrativa, un chofer de ambulancia, una mucama, un auxiliar de farmacia, un trabajador de mantenimiento hospitalario, una trabajadora administrativa del jardín maternal del hospital.

50 Esta referencia a metáforas futbolísticas era uno de los elementos que se habían mantenido en los volantes de la lista a lo largo de los años. En los volantes de campaña para las elecciones de 2009 y 2011, la Lista Morada Verde terminaba con la frase “¡La lista morada-verde tiene equipo compañeros!” (Lista Verde Morada, 2009, 2011).

51 En el capítulo 4, veremos el lugar que ocupaba la “responsabilidad en las actividades laborales de los trabajadores “profesionales” y en su dinámica sindical.

52 Yo supe de este espacio de una manera muy casual los días previos a la elección, porque sus compañeros me indicaron que podía encontrar a Federico allí, que se había tomado unos días de licencia de su puesto de trabajo para dedicarse a la campaña electoral.

53 Palabra nativa que refiere a las personas que no adhieren a las medidas de fuerza decididas por sus compañeros de trabajo o por el sindicato, o que aceptan una remuneración para trabajar mientras un sector con trabajadores está en huelga.

54 El uso del adjetivo “burocrático” para referir a una cosa mal hecha, engorrosa y complicada es muy extendido en el lenguaje cotidiano de nuestro país.

55 Puede verse el Dossier “Hacia un debate sobre el concepto de ‘burocracia sindical’” organizado por la revista Nuevo Topo (7) en el año 2010, y el Dossier “Burocracia sindical: de la dictadura al kirchnerismo” organizado por la revista Archivos de la historia del movimiento obrero y la izquierda en el año 2016.

56 Como podrían ser los aspectos afectivos que hemos visto que eran centrales en la experiencia de la agrupación Verde Morada, o como veremos en los capítulos posteriores, los aspectos profesionales que eran centrales en SiProSaPuNe y el SEN.

57 Parafraseando uno de los textos clásicos sobre sindicalismo (Anderson, 1968).

58 Esta victoria marcó una discontinuidad en el liderazgo de la lista Verde Morada, que había sido la conducción durante diez años, lo que supuso además la modificación de dos rasgos centrales en la forma de gestión de la JI: por un lado, a diferencia de la agrupación Verde Morada que se presentaba como “anti-partidaria”, la agrupación Violeta Negra se presentaba como un grupo programático articulado al PTS; por otro lado, los puestos de Delegado General y Adjunto fueron ocupados por dos mujeres, cuestión que marcó un contrapunto con la gestión anterior que estaba compuesta mayoritariamente por varones.

59 En las elecciones legislativas de 2013 consagró tres diputados al Congreso Nacional. Además, tenía representación en las legislaturas provinciales de Neuquén, Buenos Aires, Córdoba, Mendoza, Salta, Santiago del Estero y CABA. En Neuquén, el diputado por el FIT era Raúl Godoy, del Sindicato de Obreros Ceramistas de Neuquén que dirigiódel proceso de puesta en producción bajo control obrero de Zanón.

60 Farace (2016), en el análisis de los modos de participación sindical en la UOCRA, también ha registrado que allí no sólo se construían criterios de valoración sobre la militancia sino sobre en qué consistía para sus miembros ser “un buen trabajador”.

61 Algunos estudios antropológicos han mostrado el proceso de aprendizaje que atraviesan las personas cuando comienzan a participar en organizaciones políticas: Guedes (2011) ha mostrado el proceso de formación que atravesaban los nuevos militantes del Movimiento Sin Tierra en Brasil coordinados por los referentes nacionales de la organización; Manzano (2011) ha analizado el profundo aprendizaje que atravesaban los integrantes de las organizaciones de trabajadores desocupados al movilizar la estructura institucional del Estado.

62 La reflexión sobre la producción colectiva que expresan los verbos de conjugación de dos infinitivos (como hacer hacer) ha sido inspirada en el análisis de Hennion (2015) sobre el proceso mediante el cual un músico amateur hace aparecer la especificidad del objeto musical a partir de la performance colectiva.

63 Para un análisis de este conflicto, puede consultarse la investigación de Aiziczon (2009).

64 FeSProSa es una entidad de segundo grado constituida en el año 2005 a partir de la reunión de varias Asociaciones de Profesionales por establecimientos provinciales, regionales y nacionales.

65 El aumento de la demanda de atención había hecho que solicitasen seis camas más para la internación de pacientes, que les fueron asignadas en el tercer piso del hospital (cedidas por el servicio de ginecología).

66 El “pase” no era una práctica que realizaran únicamente los residentes, sino que se replicaba con todo el equipo de profesionales en lo que denominaban “pases de sala” de martes a viernes a las 11 de la mañana. La diferencia era que los residentes revisaban las novedades de los pacientes de cada una de las habitaciones (a diferencia de los “pases de sala”, en los que se revisaba un sector particular de habitaciones por día y se discutían los pacientes más complejos).

67 Como ese proceso puede ser demasiado largo y complejo, para los problemas más frecuentes, parte del método era el uso oportuno y crítico de las “heurísticas” (ej: los síndromes, combinaciones de síntomas).

68 Los médicos de post-guardia tienen que quedarse en el hospital hasta el medio día siguiente, es decir, entran a trabajar un día a las 8 de la mañana y se quedan en el hospital hasta el día siguiente a las 12:00.

69 Ver “Castro Rendón, comprometido con la vida de los pobladores” en la página web del HPN: [http://www.hospitalneuquen.org.ar].

70 Para el análisis de carreras profesionales asociadas al trabajo creativo en mercados de trabajo flexibles en Estados Unidos.

71 Ver apartado “‘Profesionales’ y ‘no profesionales’ del sistema de salud pública” en el capítulo 1.

72 En los “paros con fichado” los trabajadores concurrían al lugar de trabajo, pero sin ejercer algunas actividades, como la atención en los consultorios externos, los estudios de alta complejidad y las cirugías programadas. Los “retiros eran interrupciones de las actividades laborales por un plazo menor a una jornada de trabajo.

73 Como hemos visto en el capítulo 1, la Ley provincial 2562 sancionada en el año 2007 creó un escalafón propio para este sector de salud pública, en el que se determinaron cuatro “agrupamientos de personal”: “profesionales”, “técnicos”, “auxiliares técnicos o administrativos” y “operativos”. En el año 2011 se modificó dicha ley, incorporando algunas especificaciones en la organización de los agrupamientos, y el agrupamiento “profesional” quedó divido en tres sub-categorías: 1) la categoría “M”, que incluía a médicos y odontólogos; 2) la categoría “S” que eran todas las otras disciplinas que tenían que ver directamente con salud, como bioquímicos, farmacéuticos, veterinarios, ingenieros biomédicos, psicólogos y asistentes sociales; 3) la categoría “P”, que incluía a otras profesiones que no tienen que ver directamente con salud, como contadores, abogados e ingenieros. Todos los integrantes del agrupamiento “profesional” podían afiliarse a SiProSaPuNe (es decir, en ese sindicato estaban presentes profesionales de los tres sub-agrupamientos en los que quedó dividido el sector), aunque la mayoría de los afiliados eran médicos.

74 Raúl Godoy del PTS-FIT, Eduardo Fuentes y Raúl Podestá (Nuevo Encuentro-Frente Grande), Santiago Nogueira (Libres del Sur).

75 Todas las citas siguientes corresponden al Documento presentado por SiProSaPuNe a los diputados que conforman la Comisión de Desarrollo Humano y Social de la Legislatura de Neuquén.

76 Los enfermeros se dividían en tres categorías de acuerdo con su nivel de formación: ayudantes o auxiliares de enfermería (egresados de la escuela secundaria Centro Provincial de Educación Media n° 23), técnicos en enfermería (nivel terciario o universitario de tres años de formación) y licenciado en enfermería (nivel universitario de cinco años).

77 El día 12 de mayo de 1820 fue el nacimiento de Florence Nightingale, quien es considerada la precursora de la enfermería profesional. Más adelante analizaré como aparecía su figura en la experiencia del SEN.

78 Colocación de una pulsera de papel lavable en la muñeca del paciente donde figura su nombre, documento y edad, con el objetivo de evitar la confusión entre pacientes por parte del personal médico o de enfermería (uno de los errores que mayor perjuicio pueden traer en los procesos de atención).

79 La Licenciatura en Enfermería de la Universidad Nacional del Comahue fue creada en el año 1998, por lo que al momento de realización de esta investigación tenía únicamente 20 años de existencia.

80 En realidad el origen de este sistema de clasificación de pacientes es adjudicado al barón Dominique Jean Larre, cirujano y jefe médico de las tropas durante las guerras napoleónicas (Alpízar, 2014; Resendiz, Montiel & Limona, 2006). Eso explica que el nombre que designa a este sistema de valoración de pacientes sea una palabra en francés –triage– y no en inglés (como debería ser si su creadora fuera la enfermera Florence Nightingale). Sin embargo, no nos interesa determinar la veracidad de la información aportada por Manuel sino analizar por qué es significativo que él lo asocie a los aportes que realizó una enfermera.

81 Para lo cual puede recurrirse a las investigaciones de Faccia (2015), Martin (2015), Ramaciotti y Valobra (2015), Wainerman y Binstock (1992).

82 Disminución del número de neutrófilos por debajo de 1,000 - 1,500 cel/mm de sangre.

83 Se refiere al Sindicato de Enfermería –SATSE– (cuyas siglas se deben al primer nombre Sindicato de Ayudantes Técnicos Sanitarios de España”) fundado en el año 1986 con el objetivo conjunto de demandar diversas mejoras laborales y promover el desarrollo de la profesión. Ver [http://www.satse.es/].

Agradecimientos

Este libro es producto de un proceso de investigación que fue posible gracias diversos apoyos institucionales, laborales y afectivos.

Los resultados presentados forman parte de una investigación doctoral realizada en el marco del Doctorado en Ciencias Sociales de la Universidad Nacional de La Plata. Quiero agradecer especialmente a Mariana Busso y Virginia Manzano, en su carácter de directora y co-directora de la misma, por el acompañamiento en estos años. Ambas son grandes referentes para mí por su pasión por la investigación y por el compromiso que vuelcan en sus temas de estudio, equipos de trabajo y en la docencia en la Universidad Pública. Con ambas me une una profunda relación de afecto. German Soprano, Nicolás Diana Menendez y Osvaldo Battistini fueron jurados de la tesis e hicieron sugerencias y comentarios que ayudaron a mejorar el texto y conceptualizar parte de sus resultados. Las investigaciones realizadas por ellos han sido un horizonte para mí tanto por su rigurosidad metodológica y conceptual, como por sus apuestas a realizar teoría conceptualizado nuestra realidad social local. Les agradezco por su seriedad, generosidad y sensibilidad con esta producción.

Esta investigación contó con la financiación del CONICET, y estuvo radicada primero en el Centro de Estudios e Investigaciones Laborales (CEIL) y luego en el Laboratorio de Estudios en Sociología y Economía del Trabajo (LESET) dentro del Instituto de Investigaciones en Humanidades y Ciencias Sociales –UNLP/CONICET–. Quiero agradecer a mis compañeros Brenda Brown, Camila Deleo, Emiliano López, Facundo Barrera, Federico González, Julieta Longo, Lucía Reartes, Joaquín Lazarte, Mariana Fernández Massi, Marina Adamini, Sofía Mallevile y Pablo Pérez. Además de ayudar a conceptualizar los resultados presentados en este libro, ellos hicieron que la vida cotidiana en estos espacios estuviera cargada de afecto y amistad. También quiero agradecer a los miembros del Centro de Investigaciones Sociohistóricas –IdIHCS–, con quienes compartí buena parte de mis actividades cotidianas en la UNLP. Especialmente, quiero manifestar mi reconocimiento a Aníbal Viguera, que es sin duda una referencia política, intelectual y pedagógica para mí y muchos de los que nos formamos en la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación (FaHCE).

Diversos amigos y colegas leyeron versiones preliminares de este texto: Belén Morris, Federico González, Germán Bernasconi, Julieta Longo, Nicolás Welschinger, Rafael Farace y Clara Chevalier. Todos ellos son colegas de los que he aprendido mucho a lo largo de estos años.

Para la publicación de este libro conté con la financiación de la UNLP, a partir del otorgamiento de un Subsidio para Jóvenes Investigadores, y de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación. Quiero agradecer a la Prosecretaría de Gestión Editorial y Difusión de la FaHCE por haber apoyado y financiado esta iniciativa, y especialmente a Guillermo Banzato por todas las gestiones realizadas.

Un párrafo especial merecen los trabajadores del Hospital Provincial Neuquén ya que sin su generosidad, esta investigación no hubiera sido posible. Agradezco a todos los miembros de la agrupación Verde Morada, Violeta Negra, de SiProSaPuNe y del SEN por haberme mostrado aspectos importantes de sus trabajos y participación política, que sin duda marcaron mi propia experiencia y manera de entender el mundo. Quiero agradecer a los miembros del Sector de Clínica Médica, por haberme permitido realizar una pasantía en el sector y compartir conmigo su vida cotidiana en el hospital. También diversos trabajadores del HPN leyeron partes de esta tesis y me hicieron valiosos comentarios: Alejandra Astete, Carlos Giménez, Darío Mas, Federico Falcón, Jorge Ninno, Marcela Lima, Miriam Rivas, Nicolás Gilleta, Roberto D’Angelo, Silvina Fernández y Walter Molini. Agradezco su apertura y sensibilidad a la hora de hacer comentarios sobre el texto. A Miriam Rivas le agradezco además por haberme abierto las puertas del hospital, haber acompañado de cerca mi trabajo y por estar siempre presente en mi vida. También quiero agradecer de manera especial a Roberto D’Angelo. Mi confianza respecto de su calidad como médico excede sin dudas los límites de esta investigación, y quiero manifestar mi reconocimiento hacia su trabajo y militancia.

Asimismo, quiero agradecer a Cristen Bjerg, Amanda Barranengoa, Lucía Ameri, Florencia Elissetche, Julia Burton, Martín Garriga, Suyai Virginillo, Manuela Saralegui, Soledad Balerdi, Gustavo Beliera, Paola Genghini, Silvana Sánchez, Valentina Parra y Esther Andrade por el cariño brindado y por haberme acompañado de cerca en estos años.

Mi madre María Angélica Riquelme Mercado, mi padre Jorge Beliera y a mis hermanos Juan e Ivana Beliera que me brindaron constantemente su apoyo y contención. A los cuatro los admiro profundamente por su capacidad de amar, por su frescura y por ser trabajadores dedicados y apasionados por lo que hacen.

Fermín Martínez Ramírez fue un pilar fundamental durante todos estos años, a través de los cuales hemos crecido juntos. Me enamora su capacidad de re-inventarse, sus profundas reflexiones y la sencillez de su mirada. Al pequeño Oliverio, que invade la vida cotidiana de amor y ternura. Su sonrisa y pequeños gestos se han convertido en un refugio desde donde mirar el mundo con nuevos ojos.